¿Las bananas, los higos y las uvas engordan?
Estas tres frutas aportan más cantidad de hidratos de carbono (> 15 g) y por lo tanto más kilocalorías (> 60 kcal) por cada 100 gramos que otras frutas, como las manzanas o las naranjas.
Estas tres frutas aportan más cantidad de hidratos de carbono (> 15 g) y por lo tanto más kilocalorías (> 60 kcal) por cada 100 gramos que otras frutas, como las manzanas o las naranjas.
Para adelgazar, todo depende de la cantidad (o el tamaño de las porciones), el método de cocción y el agregado de otros alimentos a cada comida.
- Un trozo de carne, por ejemplo, de pollo, tiene menos calorías si se hace a la plancha o asado a la parrilla que si se lo fríe o si se lo hace en milanesa.
- Una ensalada de vegetales, que tiene pocas calorías, puede ser un obstáculo en el tratamiento para adelgazar si le ponemos mucha cantidad de aceite. Salvo otra indicación médica, un adulto no necesita más de una cucharada de aceite por comida.
Le sugerimos consultar con un Médico y/o Lic. en Nutrición quien le indicará el tipo de alimentos a consumir para bajar de peso.
Los antioxidantes son aditivos alimentarios que desempeñan un papel fundamental asegurando que los alimentos mantengan su sabor, color y durabilidad. Se usan en especial para evitar la oxidación de las grasas y los productos que las contienen, y por lo tanto, que los alimentos se vuelvan rancios. Otra función de los antioxidantes es proteger a ciertas vitaminas y aminoácidos de la oxidación, así como atrasar la decoloración de frutas y hortalizas. Los antioxidantes más usados son la vitamina C, los tocoferoles, los galatos, etc.
El término “alimento transgénico” en general hace referencia a aquel alimento que deriva de un cultivo transgénico o genéticamente modificado (GM), como por ejemplo: el choclo, la polenta, los copos de maíz GM, la milanesa o el aceite de soja. En un sentido más amplio, el término “alimento transgénico” también podría incluir a aquellos alimentos en cuya fabricación se emplean ingredientes provenientes de cultivos GM (ej: lecitina de soja, jarabe de alta fructosa). En cualquier caso, el término “alimento transgénico”, si bien es muy usado, no es del todo correcto, ya que el organismo genéticamente modificado es el cultivo u organismo del cual se obtiene dicho alimento y no el alimento en sí mismo. En su lugar, sugerimos hablar de “alimentos derivados de organismos transgénicos”.
Todos procesamos alimentos a diario y prácticamente todos los alimentos pasan por algún tipo de proceso antes de ser ingeridos. Algunos alimentos pueden incluso resultar peligrosos si se consumen sin procesarse debidamente. El término "alimento procesado" hace referencia al producto que resulta de aquellas acciones que cambian o convierten la materia vegetal o animal cruda en un producto seguro, comestible y que se disfruta y saborea mucho más.
Los alimentos funcionales han sido desarrollados específicamente para promover la salud y reducir el riesgo de enfermedades. En general, huelen, saben y tienen el mismo aspecto que sus equivalentes no funcionales. Tienen efectos positivos cuando se suman a una dieta equilibrada y a un estilo de vida activo. Para los que llevan una vida sana, los alimentos funcionales mejoran la salud y aumentan el bienestar. Como ejemplos de alimentos funcionales se destacan los yogures con bacterias probióticas y azúcares prebióticos, las margarinas con esteroles y estanoles, los huevos ricos en omega 3, cereales con ácido fólico y panes o barritas con isoflavonas.
A pesar de que existe cierta confusión, estos términos hacen referencia a conceptos totalmente diferentes: "trans", usado en relación a las grasas, alude a los productos de la hidrogenación parcial de los aceites, perjudiciales para la salud, mientras que el término "transgénico", define a aquellos organismos que han sido mejorados mediante técnicas de ingeniería genética.
No. Por el momento no hay ningún tomate transgénico que se comercialice en el mundo. El tomate que encontramos hoy en las verdulerías fue mejorado por métodos tradicionales y no por transgénesis.
No, hasta el momento, no hay animales transgénicos aprobados para consumo en Argentina. Hay salmón transgénico, modificado para alcanzar su peso final en menor tiempo, aprobado para consumo humano y disponible por el momento en Estados Unidos y Canadá. Existe un mito acerca del pollo transgénico, pero es eso: sólo un mito. No hay pollo transgénico ni en Argentina ni en el mundo.
Un pequeño porcentaje de la población puede reaccionar de forma adversa a determinados alimentos o componentes de alimentos. Estas reacciones pueden deberse a una alergia alimentaria o a una intolerancia alimentaria.
Los aditivos alimentarios cumplen una función importante en la preparación de los alimentos procesados, ya que se usan para preservar su frescura, seguridad, sabor, aspecto y textura. Estas sustancias se agregan con fines específicos, ya sea para garantizar la seguridad del alimento o mantener su calidad durante el almacenamiento. Por ejemplo, los antioxidantes impiden que las grasas y los aceites se vuelvan rancios mientras que los conservantes evitan o reducen el desarrollo de microbios (como el moho del pan, por ejemplo), y los espesantes permiten que las preparaciones a base de frutas adquieran consistencia "gelatinosa" para que se puedan untar en las tostadas.
No hay tomates genéticamente modificados o transgénicos que se comercialicen en Argentina ni en el mundo. Sin embargo, si uno hace una encuesta y pregunta: ¿qué alimentos transgénicos se consumen en Argentina?, más de la mitad de las personas harán referencia al tomate, y en particular al Tommy.